El amor no es ciego
El amor no es ciego

Sinopsis

Pancho Kid es un boxeador quien va a disputar el campeonato welter. El pugilista cuenta con el apoyo de su amiga Malena, una vendedora de billetes quien es ciega y ha sido su amiga desde la infancia. Por medio de un flashback, el público conoce la manera en la que la joven perdió la vista: montó un caballo y cayó, el golpe fue lo que provocó su tragedia.

 

A pesar de que el boxeador se hace amante de Nelly, no deja de pensar en Malena. En el enfrentamiento, Pancho Kid, pelea contra Joe pero los golpes lo dejan mal de la vista por lo que no podrá volver al ring. Ante la derrota, su amante lo abandona y él se da cuenta de que el verdadero amor está al lado de su amiga de toda la vida.

 

Acerca del director

 

Alfonso Patiño Gómez

Nació en la ciudad de México en 1910. Descubrió el cine con cintas como Y el mundo marcha (King Vidor, 1927), Los misterios de NY (Louis Gasnier, 1914), además de Singing’ in the rain (Stanley Donen/Gene Nelly, 1952). A los diez años era colaborador habitual del suplemento El Heraldito Infantil que publicaba El Heraldo.

 

Luego de abandonar la carrera de medicina, por su precaria situación económica, ingresa a trabajar de lleno al mundo del periodismo. Es uno de fundadores en 1928 del periódico La Prensa; escribe en la sección de espectáculos. Abandona dicho diario para fundar en 1933 el semanario Cine Gráfico. Al año siguiente  empieza a trabajar en el cine, como actor en ¡Viva México!,  Miguel Contreras Torres); además renuncia al citado  boletín y funda Mundo cinematográfico.

 

Inicia su carrera como miembro de la industria fílmica en 1938. Sus primeros trabajos fue como dialoguista de Pescadores de perlas (Guillermo Calles) y Un domingo en la tarde (Rafael E. Portas, 1938). Luego adapta Los bandidos del Río Frío (Leonardo Westphal) y La China Hilaria (Roberto Curwood); de esta última es además el productor.

 

Al año siguiente es nombrado por la UTECM (Unión de Trabajadores de Estudios Cinematográficos de México) para trabajar como asistente de director cargo que no acepta porque la condición es que se convierta en masón. Debuta como director en Carne de cabaret/Rosa la terciopelo (1939). Su segundo filme fue Cinco minutos de amor (1941). Además sustituye a Alejandro Galindo en el filme Adiós Mariquita Linda.

 

Fundador de en 1944 del Sindicato Mexicano de Directores Cinematográficos, que se convierte en la Sección de Directores del STPC, y fundador de la ANDA, Patiño Gómez además fungió como argumentistas (Voces de primavera/Jaime Salvador, 1946; Sentencia, Emilio Gómez Murial, 1949; Nosotras las taquígrafas, Emilio Gómez Muriel, 1949) y se inició como productor en 1952 con  Rostros olvidados (Julio Bracho, 1952), fundando al año siguiente la Alianza Cinematográfica, que produce Los Fernández de Peralvillo (Alejandro Galindo, 1953), Pueblo, canto y esperanza (Julián Soler/Alfredo B. Crevenna/Rogelio González, 1954),  El túnel seis (Chano Urueta, 1955), Cuatro contra el imperio (1955) y su continuación El fin de un imperio (1956), las dos de Jaime Salvador, además de Música de siempre (Tito Davison, 1956) y Las rosas del milagro (Julián Soler, 1959).

 

En 1956 fue designado director general de los Estudios América, pero declina al puesto porque se le pide abandonar el STPC y se integre al STIC.

 

Cierra su ciclo como director con Las canciones unidas (1959, codirigida con Chano Urueta, Tito Davison y Julio Bracho). Su última intervención cinematográfica fue como argumentista y adaptador del filme Cada feria un amor (Rogelio A. González, 1960). 

 

Ficha técnica

El amor no es ciego

México, 1950.

Producción: CLASA Films Mundiales, Salvador Elizondo.

Dirección: Alfonso Gómez Patiño.

Fotografía: Ezequiel Carrasco.

Música: Rosalío Ramírez  y Federico Ruíz

Sonido: Rafael Ruiz Esparza y José  de Pérez

Escenografía: Jesús Bracho

Edición: Jorge Bustos

Con: David Silva, Silvia Pinal, Nelly Montiel, Fernando Soto, Eugenia Galindo, Adalberto Ramírez y  Luis Aceves Castañeda.